El viernes la consejera de Salud del Gobierno de Navarra fue testigo en primera persona de las reivindicaciones de los MIR navarros. Iba María Kutz a la celebración de las bodas de plata de la UCI del Hospital de Navarra y los residentes decidieron que era un buen momento para hacerle ver a la consejera que están dispuestos a que se les oiga y se tenga en cuenta sus proclamas: si en otras CCAA se les ha reconocido que son Médicos (en mayúsculas), ¿por qué no en Navarra, comunidad desarrollada y admirada por su Sanidad?
Más de un centenar de médicos residentes se pusieron a la entrada de la sala de actos del Hospital a la llegada, a las seis y media de la tarde del viernes, de la consejera. De forma tranquila, con pancartas reivindicativas y destacando esos poco más de 6 euros netos por hora trabajada los días de guardia. Charlando después con una amiga enfermera que iba a la celebración de la UCI (trabaja en ella), se quedó sorprendida de que los "mires" cobraran tan poco la hora, y más aún de que cobrasen lo mismo independientemente de que la guardia fuese un martes, un domingo o un 25 de diciembre, o de que fueran las cinco de la tarde que las tres de la mañana (nada de nocturnidad).
Si algo tiene esta señora consejera -lo dice uno que la ha tratado en primera persona- es mano izquierda: es dura negociando, pero también es inteligente. A las buenas se pueden conseguir cosas, pero a las malas... ella puede ser muy mala. Si todos son ecuánimes, el acuerdo llegará. Ella, médico (microbióloga, creo) y residente en su día, sabe perfectamente de la situación y sabrá de cómo manejarla. No va a dar y ceder todo, pero puede ayudar a conseguir parte.
lunes, 5 de febrero de 2007
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